Ejes para la evangelización

Al sueño provincial  lo dinamizan tres ejes para la evangelización. Con el deseo de dar pasos y definir algunos senderos, distinguimos estos tres ejes como elementos transversales de nuestra acción evangelizadora.

Ya entendidos como dinamizadores que interactúan y fraguan el sueño provincial, nos proponemos que estén presentes en el trazado de los planes pastorales de cada comunidad, posición o equipo pastoral de la Provincia.

• Eje de apertura a la trascendencia. La apertura a la trascendencia la entendemos como un modo de provocar, en nuestra misión, un encuentro con Jesucristo y la Buena Noticia del Reino. Este es el elemento basal e irrenunciable por el cual adquiere sentido nuestra vida convocada y enviada a anunciar al Dios de la Vida.
• Eje de cuidado de la fraternidad. Con este eje hacemos resonar una invitación a la profecía de la comunión con gestos concretos de confianza y acompañamiento. Desde aquí se contempla la necesidad del cuidado de los vínculos en diversos niveles de nuestra vida, para sanar heridas del pasado y prevenir abusos de diversa índole en el futuro.
• Eje de audacia transformadora. Con la audacia transformadora renovamos el compromiso eclesial de una conversión pastoral capaz de producir cambios significativos. Es por ello que actúa como un movimiento de salida, desde los espacios de conservación o anquilosamiento, para abrirnos a la creatividad del Espíritu en nuestras posiciones misioneras.

Descritos de este modo, los ejes son un modo de caminar la vida y pensarnos en ese camino. Son, por ende, propuestas reflexivas que animan una revisión de las propias prácticas como evangelizadores, de modo que seamos los primeros en recibir la Buena Noticia de la liberación.

Esta propuesta, está enraizada en ciertos principios, que los podemos comprender como pilares que definen la misión claretiana y nos hacen estar en común con misioneros en distintas partes del mundo.

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